Malas compañías
04 de septiembre de 2009
 

Al final los amigos acaban siendo parte de tu familia, bajo cualquier circunstancia tener un amigo de quien echar mano es una bendición, aunque a veces te provoquen mas corajes que alegrías, sabes que cuando necesites de ellos ahí estarán.

No siempre son los mejores, inclusive se atreverán a decirte que no son buenos para ti, ja! ¿Como no van a ser buenos para mi? Si yo los he escogido.

El ejemplo es claro, mi mejor amigo y yo podemos hacer cualquier cosa, o no hacer nada, y pasar el mejor tiempo.

Mis amigos de ningún modo son malas compañías… aunque lo parezca y si así fuera… estoy seguro que no son las mejores compañías pero si las más divertidas.

  Julio
 
 
 
Comentarios:
 
 
Deja tu comentario:

(requerido)

(requerido)


Síguenos en Twitter
Archivo de contenidos RSS
Únete al grupo en Facebook
 
Últimos contenidos publicados: