Islas
11 de febrero de 2009
 

Un tinto sobre la mesa al lado de una vela que solo permitía ver sombras e imaginar lo demás, Él, sentado con la pierna cruzada y Ella a punto de romper lo que se conoce como “distancia social”, esa que tanto estorba cuando las ganas por besar son tan grandes.

Los ojos de Ella exigían menos distancia, las manos de Él pedían tregua y así era la charla tan directa, que la honestidad era lo único que mantenía encendida la llama de esa vela, único testigo en esa noche fría.

No se realmente como piensan los hombres, si teniendo frente a su nariz a quien es el amor de su vida, se resisten, se niegan, se pierden…

Él: Todos los hombres somos islas… Yo soy una isla

Ella: No te preocupes, sé nadar

  Julio
 
 
 
Comentarios:
 

 
Deja tu comentario:

(requerido)

(requerido)


Síguenos en Twitter
Archivo de contenidos RSS
Únete al grupo en Facebook
 
Últimos contenidos publicados: